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Borraja
Nombre científico: Borago officinalis Linnaeus Fam. Boraginaceae
Nombre vulgar en español: Borraja fina, rabo del alacrán.
Características: Originaria de Europa y cultivada en gran parte del país, mide entre 30 cm a 1 m de altura. Casi todo el tallo tiene pelillos y las hojas son pequeñas, es una planta robusta, muy ramificada, toda cubierta de pelos ásperos y tiesos, con las hojas ovales y agudas. Las flores son de color azul, raramente blancas y violáceas, tienen el cáliz dividido en cinco partes con forma de estrella, al madurar quedan colgadas hacia abajo. Crece en terrenos arenosos, cultivándose una variedad más escogida, que se consume como hortaliza. Crece asociada a diversos tipos de selva tropical caducifolia, subcaducifolia, subperennifolia y perennifolia; matorral xerófilo, bosques mesófilo de montaña, de encino y mixto de pino.
Partes utilizadas: Hojas, flores y semillas.
Usos: Como diurética y sudorífica. Tiene aplicaciones medicinales contra la tos, bronquitis, depura la sangre, enfermedades de los riñones, hígado, vejiga, reumatismo, sarampión, escarlatina, flatulencia, retención de orina, gota, fiebre y urticaria.
Remedios caseros:
Como diurético, sudorífico: Preparar una infusión de 10 g de hojas por litro de agua. Tomar como agua de uso.
Bronquitis, fiebres, problemas de la piel como los que provocan la viruela, la escarlatina, la varicela y el sarampión: Tomar infusiones de las hojas con dosis de 10 g por litro de agua.
Infecciones estomacales, flatulencia, úlceras: Tomar el cocimiento de 10 g de ramas y flores por litro de agua.
Nerviosismo: Picar muy bien 3 hojas, poner en un recipiente y añadirle 3 cucharadas de leche y una de miel de romero, revolver. Tomar entre 3 y 6 cucharaditas diarias durante una semana.
Inflamaciones de las vías urinarias, afecciones respiratorias, catarros bronquiales, tos, ronquera: Preparar una infusión con 15 g de flores en 1/2 litro de agua hirviendo, dejando cocer unos 30 minutos. Tomar caliente endulzado con miel o azúcar.
Gota: Para uso externo se prepara un cataplasma hirviendo un puñado de hojas, ya escurridas se colocan sobre una gasa, se machacan y aplican calientes sobre la parte afectada.
Afecciones del hígado y riñones: Se cuece y se come como verdura (como si fueran acelgas). El líquido resultante de la ebullición es un buen diurético. Hay quien las prepara rebozadas con huevo y harina friéndolas con mucho aceite.
Fragmento de la obra "Remedios Doña Lupe"