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Cómo inculcar virtudes en nuestros hijos
Cada que tenga una oportunidad hable con sus hijos acerca de tener virtudes. Hágalo permanentemente, la educación moral es para toda la vida. Haga una “alfabetización moral”. ¡Que sus hijos no ignoren las virtudes humanas! Nunca una persona es demasiado pequeña para que se le enseñe el significado de una virtud. Hágalas parte del lenguaje común en su hogar. Léales, hábleles, cuénteles historias, llévelos a donde les hablen también sobre éstas.
- Elogie las virtudes y no los resultados.
- Al terminar sus hijos un trabajo elogie las virtudes que se aplicaron en ese trabajo, por ejemplo el esfuerzo, la perseverancia, etc.
- El elogio fomenta el desarrollo de las virtudes.
- Conviértase en un padre buscador de virtudes en sus hijos, y cuando las encuentre, elógielas, como por ejemplo:
Fuiste muy amable al abrirle la puerta a tu mamá...
Me agradó mucho ver que tuviste mucha disciplina cuando...
Al terminar tu carrera, has demostrado que eres perseverante...
El elogio debe de incluir una descripción clara de cómo se aplicó la virtud, no debe de ser generalizado como estos:
- Elogie claramente la acción. Por ejemplo: Eres muy responsable.
- Elogie con palabras, reconocimientos, celebraciones y de diferentes maneras. Por ejemplo: Eres tan bueno, hijo.
Cuando usted elogia, comunica a sus hijos lo que usted valora. Cuando usted elogia las virtudes detrás de las acciones, los pensamientos y las actitudes, entonces sus hijos entenderán lo que es importante para usted, y después lo será para ellos. Si usted les habla mucho de la importancia de la honestidad y no castiga un acto deshonesto, las acciones contradicen a la comunicación, por lo tanto no surte efecto. Usted a través de este acto les está mandando un mensaje claro a sus hijos: “en realidad no importa”.
Exija comportamiento a la altura de las virtudes que desea que sus hijos adopten. Exija actitudes correctas, palabras correctas y acciones correctas. El carácter moral se moldea a través de la exigencia del liderazgo.
Fragmento de la obra “Enciclopedia de virtudes”. Autor: Pablo Zamora